Pagos excesivos injustificados, inversiones perdidas y lucro cesante: una dolorosa lección que podría haberse evitado. Te contamos los errores financieros típicos y cómo evitarlos.
Lo que no hay que hacer: grandes errores financieros
Error nº 1. Comprar activos ilíquidos o abaratarlos a crédito
Es sensato pedir un préstamo sólo si se obtiene un beneficio de los fondos del préstamo invertidos que supere el pago en exceso de los intereses. Si compras un piso en un buen barrio con una hipoteca, puedes esperar que su valor aumente con el tiempo y la inversión se amortice: en este caso es razonable pedir un préstamo. Si compras aparatos o electrodomésticos a crédito, lo único que haces es pagar de más: nunca te saldrá a cuenta.
Tampoco es aconsejable comprar a crédito bienes ilíquidos, que serán difíciles de vender más tarde, o abrir un negocio con una amortización impredecible. Esto no sólo es poco rentable, sino también peligroso. Si no puedes devolver el préstamo, no podrás vender el bien comprado y pagar la deuda.
Error nº 2. Comprar bienes nuevos cuando se pueden comprar usados
Hablamos en primer lugar de coches y equipos caros. Comprando un coche en un concesionario, pierdes dinero. Es más razonable coger un coche con poco kilometraje. No notará la diferencia, pero podrá ahorrar dinero. Lo mismo ocurre con equipos como una máquina láser, una miniexcavadora o un cortacésped.
Error nº 3. Pagar de más por una marca
A veces una marca es garantía de calidad. Otras veces, es sólo un nombre. Hay que saber distinguir una de otra. Es razonable pagar más por un artículo de calidad que durará más, será más fiable y seguro. No es razonable pagar de más sólo por el nombre, teniendo a mano análogos baratos de la misma calidad.
Error nº 4. Tener vergüenza de pedir un descuento
Un descuento personal es una forma superrápida de conseguir una ganga. Muchos vendedores incorporan un descuento en el precio de un artículo para tener un margen de regateo y parecer más complacientes a los ojos del comprador. Los programas de bonificación y los sistemas de devolución de dinero funcionan sobre la base de estos sobreprecios iniciales.
Error nº 5. Asumir riesgos donde se puede contratar un seguro
Los seguros de vida, salud y propiedad son una defensa contra los desastres financieros. Sí, tiene que pagar una póliza de seguro con regularidad, pero es un gasto previsible que se ajusta fácilmente a su presupuesto. Al renunciar a un seguro, aumenta el riesgo de empeorar considerablemente su situación financiera.
La falta de ahorros también se considera como descuidar los seguros. En lugar de asegurarte reservando una pequeña cantidad de tus ingresos, te arriesgas y lo gastas todo sin tener saldo.
Error nº 6. Uso descuidado de préstamos y tarjetas de crédito
Si pagas sólo las cantidades mínimas en los préstamos e incumples las condiciones de pago, no sólo aumentas los costes de administración de tu préstamo, sino que también reduces la probabilidad de obtener condiciones favorables en el futuro, es decir, pagas de más ahora y pagarás de más después.
Error nº 7. Olvidar las suscripciones
No hacer un seguimiento y cancelar suscripciones innecesarias a servicios y aplicaciones es lo mismo que tirar el dinero de forma habitual e intencionada. Decimos “lo cancelaré más tarde” y olvídese del asunto hasta la próxima vez que le carguen el dinero.
Error nº 8. No llevar un registro de las finanzas
Si no llevas un registro de gastos e ingresos, no sabes a dónde va tu dinero, no ves soluciones para mejorar tu situación financiera, no puedes calcular tu carga crediticia y tus riesgos. Sin un plan financiero, el dinero se gasta de forma espontánea: la probabilidad de cometer alguno de los errores aumenta. Asegúrate de anotar tus gastos del mes en curso y haz un plan para el mes siguiente.
Todos estos errores se deben a la falta de conocimientos financieros y a la irresponsabilidad. Aprende a gestionar la tesorería y a tener autocontrol. Son habilidades importantes sin las cuales el éxito financiero es imposible.